Crónica de un cumpleaños anunciado. O un festejo al estilo Bunker

El día de ayer (15 de Diciembre) fue mi cumpleaños. Micha me había dicho que podía festejarlo en el Bunker y después de una asesoría con El Consejero del Bunker me decidí a armar fiesta ahí.


El día no comenzó de una manera normal. El 14 era jueves, corte de semana Bunker, pero yo no había podido asistir debido a que mi familia había tenido cena. Mi familia se fue temprano, como a las 12. Me conecté para checar mi correo y vi que tenía una tarjeta de Claudia. La primera felicitación. Me sentí súper bien. No había nada más en mi correo y me puse a jugar FIFA 2007.

Entonces a las 2 de la mañana suena el teléfono. Era Paúl, que estaba en el Bunker y hablaba para felicitarme. Después me pasa a Smells. Smells estaba ahogado y de un momento a otro me dice: “Ahh... entonces si no vienes nosotros vamos a ir por ti”. Llegó Paúl y Smells a las 2 y media y nos fuimos para el Bunker. En el camino Smells gritándole a todo descuidado frases como: “Ahogadez!! Cumpleaños del Fraga!! Los del OXXO.. PUTOS!!”

Llegamos al Bunker, bebimos un rato. Me cantaron las Mañanitas (algo muy muy muy bizarro en ese hoyo de ahogadez, pero que se agradece) y emprendimos la retirada a las 4 y media de la mañana. Se vivieron momentos muy surreales pero me la pase muy chingon. Smells me llevó a su casa en un peligroso 9.3 de ahogadez pero ha de sorprenderme el hecho de que maneja mejor briago que sobrio. Más de 700 horas manejando briago lo respaldan. Llegué a dormir, me despertaron con mensajes a las 7, a las 8, a las 9 y finalmente a las 10 decidí levantarme. No descanse mucho.

En la tarde invité a comer a Claudia a mi casa. Me regaló una camisa y un pastel. Un detalle súper chido. Estuvimos con mi familia un buen rato, bromeando, recordando viejos momentos y comiendo riquísimo. Fui a dejar a Claudia y regrese a bañarme para la fiesta.

Comenzó súper tranquilo el asunto, Claudia y yo llegamos un poco antes para poder quitar algunas cosas de basura que habían quedado de la borrachera anterior. Finalmente comenzaron a llegar los invitados y de pura casualidad (quien habrá sido…) alguien puso la de Terminator 2 en el DVD. Terminamos de verla, cada vez había más amigos. Puro campeón reunido. Claudia, Gerardo, Manuel, Israel, Gerardo Espino, Tere, Rata, Itzury, Isabel, Caro y el Pucho. Cuando terminó la película nos dimos cuenta de que los pomos estaban casi intactos. Eran 2 y medio pomos de Baraima, la bebida oficial del Bunker. Llegó parte del Bunker Staff (Pedrito, Micha y Smells) junto al Compadrito y yo tontamente dije “Hay mucho parque pero poca sed” refiriéndome a lo poco consumido de los pomos. Eran las 10 aproximadamente. Llegó Nils, un amigo al cual no veía hace muchísimo tiempo. Cuando fui a dejar a Claudia ya no había alcohol y me encargaron pasar por una botella. Eran las 12 y media. Dejé a Claudia en su casa, pasé al OXXO y de ahí al Bunker. Enseguida salí con Israel por otras cosas más (otro pomo) en el OXXO y se nos añadió un wey amigo de Nils al que nunca habíamos visto. Nos trataba como brothers a pesar de que no lo conocíamos y hasta bromeaba con nosotros.


La peda siguió, y siguió, y siguió hasta que en un momento crucial Micha dijo: “Fraga, revienta una botella de Baraima en la pared”. Yo dije que no, que no iba a reventar un pomo ya que se coleccionan, pero le dije que mejor reventaba un casco de cerveza. Accedió y Micha y yo fuimos al patio a reventar un casco, luego Micha reventó otro y cuando nos dimos cuenta toda la peda se había trasladado al patio y todos estaban reventando botellas al ritmo de “Heart Shaped Box” de Nirvana. Momento de huevos, desestresante, para mandar a la chingada las malas vibras, para pitorrearte, para echarte un cigarro. Como me gustaría denominarlo a partir de ahora, el “Nirvanazo”. El saldo final de esta masacre fue:

Infinidad de cascos de cerveza, incluyendo de caguamas, reventados.
Una silla sin patas, reventada.
Una aspiradora inservible, reventada.
Una afortunada botella de cerveza, atorada en la reja arriba de la pared.
Dos sobrevivientes de un cartón de Nochebuena, reventadas.

Triste... lo se... pero tenían que ser sacrificadas por el bien de la peda. Si no hubiéramos sacado esas malas energías posiblemente nos habría dado alguna cosa en el corazón. Lo bueno es que no hubo lesionados.

Acabamos alrededor de las 4 y media de la mañana, se consumió un pomo pequeño de mezcal que mi buen amigo Gerardo Espino llevó como regalo. Si no mal recuerdo también se acabaron 4 o 5 botellas de Baraima, bebida oficial Bunker.

Estuvo muy chingon. Gracias a Micha y al Staff, incluyendo al Consejero, por prestarme las instalaciones del Bunker para la fiesta. Pero ante todo gracias a todos por haber estado ahí, Claudia, Gerardo Espino, Gerardo Vázquez, Israel, Smells, Micha, Nils, Paúl, Tersa, Itzury, Isabel, Caro, Manuel, Pedro y Pucho. Si olvidé a alguien discúlpenme pero por el momento son todos los que puedo recordar. Gracias por hacer de este un cumpleaños de huevos. Y los que no estuvieron pero que también me hablaron o me mandaron mensajes o postales, muchísimas gracias! Para el otro año nos desquitamos.

Saludos!!